(DES)AHOGO.

Cuando me siento mal me gusta escribir, es una sensación de desahogo total. Soy una persona que se que cometo muchos errores, como todo el mundo, que tengo mil defectos y que soy difícil de aguantar. Pero si de algo también estoy segura, es de que cuando me importa alguien lo doy todo. Doy todo por aquellas personas a las que quiero y que dicen ''quererme''. El caso es, que como siempre pasa, te das cuenta que por quien has sacado siempre la cara son las personas que te la juegan y que en el fondo no las importabas una mierda. Lo bueno de esto, es que te das cuenta de quien merece la pena y quien no. Lo malo es la decepción que te llevas. No me gusta la gente egoísta que solo mira por su bien, (seré rara). Pero me han demostrado que entonces, para que no sufras, tienes que comportarte como una verdadera hija de puta y pasar de todo el mundo. Hay cosas que por mucho que intentes comprender no tienen ninguna escusa o razón coherente. No me debería importar la opinión de la gente, puesto que los que pueden pensar cosas que me hagan daño se que es gente que no me conoce y que no ha estado ahí conmigo para ver las cosas. Si de algo estoy segura es que no me voy a echar la culpa de cosas que no considero iniciadas o motivadas por mi. Podéis ponerme a parir, pero me encantaría que primero os vieseis reflejados a vosotros mismos y me dijerais qué cojones os he hecho. No soy ninguna santa, por supuesto. Todos tenemos nuestras cosas y nadie es perfecto. Lo único de lo que me arrepiento es de no haberme dado cuenta antes y de no haberme valorado lo suficiente, ni a mi misma, ni a los míos, a los que verdaderamente sí que están para lo que necesites. No vale la pena derramar ni una lágrima más por personas que te hacen sufrir y lo único que quieren es hacerte daño. Por ultimo, agradecer a la gente que me apoya estos días, os quiero mucho.